Espero no tardar mucho, pero comprendan que tampoco soy muy ducho en estos menesteres. Un servidor y los serruchos, alicates y demás demoníacas herramientas, no somos que digamos, íntimos.
Además, y sirva de excusa, no es lo mismo las técnicas de ahora que las de hace diez años. Pasar del rústico martillo con bola, el de toda la vida, a uno de diseño espacial, con láser que te indica el punto exacto dónde atizarle el mandoble a lo que se tercie, y que incluso puede llevar incorporado "GPS" "Windows 7 u 8 ó 9 ó 10" y la madre que lo parió, lleva su rodaje.
Así que, tengan una pequeña, caritativa y misericorde paciencia conmigo, mientras hago diversas y, desde luego para mí, complicadas pruebas "blogueras" para dejar "chachi-guay-mega-cojonudo" este balcón tan mío como suyo.
Muchas gracias y PERDONEN LAS MOLESTIAS.