Me asalta la duda: ¿venden casa y regalan residencia? o ¿venden residencia y regalan casa?. Es más, dado que una de las intenciones es atraer extranjeros de esos de alto standing - para los que 160.000 € es un pellizco de nada - y que estos
Pepés han heredado de los
ZP's - entre otras cosas - la costumbre de ocultarnos sus verdaderas intenciones, puedo llegar incluso a cuestionarme si en realidad regalan las dos cosas a cambio del coste de una rebajada "entrada Vip" al país para ricos. Convertir este país en un posible "paraíso fiscal" para forrados rusos, chinos y otros nuevos ricos les puede sonar a ustedes a ciencia ficción o locura otoñal de éste su humilde servidor... pero no me negarán que tentador es un rato y descabellado, descabellado, no tanto. Acostumbrados nos tienen a esperpentos peores.
Por otro lado, no me parece tan mal la idea (a pesar de que sé que no van a estar de acuerdo conmigo). Veamos: En España hay 1.000.000 de viviendas que no tienen salida, la mayoría en la costa. Los españoles no estamos para meternos en casas - al contrario, nos están echando de ellas - por lo que hay que buscar pardillos de fuera a quién encasquetárselas. Nuestros hermanos europeos, que son muy amantes de nuestras playas y nuestro
"Lorenzo", no están tampoco muy boyantes; los Moody's y Standard & Poor's están ciscando a toda la Unión sin miramiento alguno. Ingleses y alemanes, que pudieran ser una apuesta, ya tienen comprada media España... Así es que, echemos el lazo a economías emergentes fuera de las fronteras Comunitarias. Y como hicieran los bancos con nosotros para engatusarnos y engancharnos a sus pestilentes servicios, les damos un regalito. Naturalmente no les vamos a enganchar con un juego de toallas o la vistosa freidora. Algo que les sea de utilidad y a juego con su compra: la residencia, el pack perfecto. Nuevos ricos rusos y chinos parecen destacar sobre los demás. Si vienen y traen dinerito bienvenidos sean. Si encima se quedan, procrean y por tanto aumenta la población con pasta gansa (pensemos en nuestras pensiones futuras) miel sobre hojuelas. Añadamos que les da por crear negocios que pueden suponer puestos de trabajo, pues para qué quieres más... Ya sé que me van a mentar las mafias... pero esas ya están aquí desde hace mucho tiempo - esas y las patrias - y no nos hemos muerto. Teniéndolas más o menos controladas no va a suponer mucho más problema...y qué quieren que les diga: prefiero quinquis ricos y contribuyentes a los que actualmente tenemos por todas las calles de nuestras ciudades, sin dar un palo al agua pero sí atizando buenos palos y encima no cotizando nada y recibiendo ayudas que no nos podemos permitir. Olvidemos ya el
"papeles para todos" del ingenioso hidalgo Zapatero (algo inasumible, no me jodan) y saquemos provecho de donde podamos, que no están los tiempos para paños templados y mamandurrias. Mi abuela, muy lista, como todas las yayas, solía decir:
«por la caridad entró la peste»... pues eso.
Sólo hay una pega, algo que me empuja a temer que todo esto fracase: doña Fátima Bañez está metida en el asunto ya que es la jefa de la Secretaría de Inmigración. No me discutirán que vistos los resultados negativos de todo lo que toca o le atañe:
"avíaos estamos". Esta muchacha, experta en "brotes verdes", se me representa del mismo nivel que don Miguel Martín - presidente de la Asociación Española de Banca - un lumbreras que ha afirmado que
"hay que construir más casas y dar más hipotecas". No me pregunten si lo dijo antes o después del café,
copas y puro; me inclino más al después. Hoy, ya pasados los efluvios de lo que fuera, ha querido matizar. Vamos, lo de siempre:
"no quería decir lo que dije pero dicho está y ustedes lo sacan de contexto para distorsionar la realidad de lo dicho que en verdad es: donde dije Diego quería decir digo; digan ustedes lo que digan".
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